El pueblo de Dios



Hemos visto que la iglesia es el nuevo pueblo de Dios convocado por Jesucristo para la salvación de toda la humanidad. No es menester ser judío, como en el antiguo pueblo de Israel, para pertenecer al pueblo de Dios. Este carácter de la Iglesia es lo que la hace católica, es decir universal



Lee el siguiente texto para comprender mejor lo anterior, pertenece a los documentos del concilio Vaticano II que ya hemos estudiado:

Todos los hombres están llamados a formar parte del nuevo pueblo de Dios. Por lo cual, este pueblo, sin dejar de ser uno y único, debe extenderse a todo el mundo y en todos los tiempos, para así cumplir la voluntad de Dios... Así pues, e único pueblo de Dios está presente en todas las razas de la tierra...
Este carácter de universalidad, que distingue al pueblo de Dios, es un don del mismo Señor con el que la Iglesia católica tiende, eficaz y perpetuamente, a recapitular toda la humanidad, con todos sus bienes, bajo Cristo cabeza, en la unidad del Espíritu.
Lumen Gentium, 13



Si la Iglesia se entiende como pueblo de Dios eso significa que consistirá solo en una clase de dirigentes dentro de la congregación de los creyentes. Iglesia será siempre todo el pueblo de Dios, toda la comunidad de los creyentes. Lo cual nos hace caer en la cuenta de un dato importante, la igualdad de todos sus miembros. 

Este concepto, nacido especialmente del último concilio, el Vaticano II cambia la concepción vertical o piramidal de la iglesia por la que ya hemos estudiado de pueblo, donde cada uno tiene su carisma y cada miembro posee una función.
San Pablo lo entendió así:

Pues tampoco el cuerpo es un solo miembro, sino muchos. Si el pie dijera: «Como no soy mano, no soy del cuerpo», no por eso dejaría de ser del cuerpo. Y si dijera el oído: «Como no soy ojo, no soy del cuerpo», no por eso dejaría de ser del cuerpo. Si todo el cuerpo fuera ojo, ¿dónde estaría el oído? Si todo fuera oído, ¿dónde estaría el olfato? Ahora bien, Dios dispuso cada uno de los miembros en el cuerpo como quiso. Si todos fueran un solo miembro, ¿donde estaría el cuerpo? Ciertamente muchos son los miembros, pero uno solo el cuerpo. No puede el ojo decir a la mano: «No te necesito»; ni tampoco la cabeza a los pies: «No os necesito». Más aún, los miembros del cuerpo que parecen más débiles son más necesarios (...)
Y Dios los dispuso así en la Iglesia: primero apóstoles, segundo profetas, tercero doctores, luego el poder de obrar milagros, después el don de curaciones, de asistencia a los necesitados, de gobierno, de diversidad de lenguas. ¿Son todos apóstoles? ¿O todos profetas? ¿O todos doctores? ¿O todos tienen poder de obrar milagros? ¿Tienen todos don de curación? ¿O hablan todos lenguas? ¿O todos tienen don de interpretación?

Por eso en este cuerpo cuya cabeza es Cristo todos los miembros de la iglesia son igual de necesarios e importantes.

Por último explicamos, siempre se comprende un poco peor, el término laico, lee la siguiente afirmación y después contesta a las preguntas:

Etimologicamente el concepto laico designa al que pertenece al pueblo (laos) y este es el sentido dogmatico que tiene en el Vaticano II: miembro del pueblo de Dios, bautizado, fiel, cristiano, etc...

Diccionario de pastoral, Verbo Divino, 253



Preguntas y tareas

1) Investiga sobre qué miembros componen el pueblo de Dios en la iglesia.

2) ¿Quiénes son los religiosos? ¿Hay congregaciones religiosas femeninas, pon algún ejemplo?

3) ¿Quiénes son los laicos?

4) ¿Según los textos que hemos visto, podrías explicar la condición de "igualdad" para todo el pueblo de Dios?

5) ¿Qué significa católico?

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